Por: José Antonio Villanueva Ch.

En Uruapan, precisamente en la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, cada año, el 12 de octubre, se lleva a cabo una gran fiesta con la que se celebra el aniversario de la Coronación Pontificia de la Morenita del Tepeyac, un acontecimiento importante que ocurrió en 1895, cuando no solamente fue proclamada Reina de México, sino también Emperatriz de América.

Como en otras ocasiones, la celebración 2023 transcurrió en medio de un sin número de muestras de cariño, ofrendas florales, música y cohetones. Para la festividad, los fieles de la parroquia, principalmente un grupo de ministros laicos y agentes de pastoral, asesorados por el párroco del lugar y los sacerdotes vicarios, organizaron los preparativos, en el marco del 128 aniversario de la coronación de Nuestra Señora de Guadalupe.

Entre las principales actividades que se llevaron a cabo, el lunes 9, a las 7 de la noche, se tuvo una solemne celebración eucarística, en la que servidores y ministros laicos de la parroquia renovaron su compromiso de servicio a la comunidad parroquial. La ceremonia fue presidida por el Sr. Cura Sergio Alejandro Arroyo Rodríguez, quien resaltó que a los ministros debe distinguirlos el servicio y la fidelidad a la Iglesia, especialmente en su parroquia; además, tanto los ministros laicos como los miembros de los diversos grupos apostólicos parroquiales se consagraron solemnemente a la Santísima Virgen María.

El día de la fiesta, entre otras actividades, a las 3 de la tarde se realizó una solemne procesión por las principales calles de la ciudad, comúnmente llamada en Uruapan la “peregrinación ”, con la imagen peregrina de la Virgen de Guadalupe, en la cual participaron jóvenes y adultos de las diferentes capillas y los grupos y movimientos apostólicos de la parroquia; el recorrido de fe inició en el centro de la ciudad y culminó en el templo parroquial, al que se unieron familias, ciclistas, empresas e instituciones como la Universidad Don Vasco, con carros alegóricos, ofrendas florales y coronas, que fueron depositadas a los pies de la Reina de México, con mantas alusivas y mensajes de paz.

Finalmente, la solemne misa de función se llevó a cabo a las 6 de la tarde, presidida por el Pbro. Francisco Javier Medina García, Vicario de Nuestra Señora Guadalupe, quien estuvo acompañado por el párroco del lugar; la homilía de la ceremonia estuvo a cargo del Pbro. José Jesús Tello Bárcenas, Vicario de Nuestra Señora de Guadalupe, quien resaltó la figura de la Guadalupana en la evangelización de estas tierras mexicanas.

Además, durante todo el día, la Santísima Virgen fue visitada, como en otras ocasiones, con aclamaciones, al igual que vivas y súplicas, oraciones, el rezo del santo Rosario y una hora santa solemne, que culminó con la quema de un castillo, en medio una gran kermés instalada a las afueras del templo parroquial a cargo de los grupos y movimientos parroquiales. ¡Santa María de Guadalupe, esperanza nuestra, salva nuestra patria y aumenta nuestra fe!