Por: José Antonio Villanueva Chávez
La Santa Madre Iglesia Catedral de Zamora se vistió de fiesta, el sábado 11 de noviembre, para celebrar solemnemente la memoria litúrgica de San Martín de Tours, popularmente conocido como San Martín Caballero o San Martín Obispo, quien, junto con la Inmaculada Concepción, es titular de este recinto sagrado, donde se asienta “la Cátedra del Obispo” y es la “cabeza de las demás iglesias”, siendo ésta la principal de todas las que integran esta porción del Pueblo de Dios que peregrina en la Diócesis de Zamora.
Aunque la imagen de San Martín de Tours, desde hace tiempo no preside el altar mayor o retablo principal de la Catedral, ya que fue bajada, para colocar la de la Inmaculada Concepción, su imagen preside un altar lateral, dedicado a San Miguel arcángel, cuya inscripción sobresale en la parte alta de dicho espacio, situado en el lado derecho de este recinto, que ahora ocupa la imagen de San Martín, flanqueada por las imágenes de los santos apóstoles Pedro y Pablo.
Cabe destacar que, en uno de los cruceros de la Catedral, precisamente a mano izquierda, frente a la puerta de la sacristía, en el coro alto, se puede apreciar un mural cuyo tema es la muerte de San Martín; este mural, en conjunto con otros murales, son obra del pintor jalisciense Rosalío González Gutiérrez.
Como parte de los festejos, al medio día se llevó a cabo una santa Misa y la Unción de los Enfermos, presidida por el Pbro. Felipe Cuarao Roque, Rector de la Catedral, quien estuvo acompañado por los PP. J. Jesús Contreras Plancarte, Vicario General de la Diócesis de Zamora y Jesús Manuel Galván Rincón, colaborador de Catedral. Finalmente, a las 6:30 de la tarde, se llevó a cabo la solemne concelebración eucarística de la fiesta, presidida por Don Javier Navarro Rodríguez, Obispo de Zamora, quien en la homilía hizo un breve recorrido por la vida del santo Obispo de Tours, quien, al encontrar a Cristo, a través de la pobreza y sencillez, siguió el camino de la perfección y santidad. También invitó a los presentes a seguir fielmente las huellas de Cristo; además, en esa ceremonia renovaron su compromiso de servicio, un grupo de ministros laicos, así como acólitos y monaguillos.
Durante todo el día, los asistentes, como gesto de participación y devoción, colocaron a los pies de la imagen de San Martin, diversas ofrendas y peticiones, ya que desde tiempos inmemoriales es considerado como el santo patrono de los comerciantes.
¡San Martín de Tours, ruega por nosotros!
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