Por: José Antonio Villanueva Ch.
Bajo el lema: “Las vocaciones nativas al servicio de la Iglesia Universal”, se llevó a cabo, el domingo 18 de agosto, la Jornada por las Vocaciones Nativas en México, que tuvo como sede la Diócesis de Zamora, precisamente en la comunidad parroquial de San Pedro Apóstol, en Paracho; la Jornada de Vocaciones Nativas es un día especialmente dedicado a la oración y cooperación con los jóvenes que son llamados al Sacerdocio o la Vida Consagrada en los territorios de misión.
De acuerdo con el Papa Francisco: “Esta jornada nos invita a considerar el precioso don de la llamada que el Señor nos dirige a cada uno de nosotros, su pueblo fiel en camino, para que podamos ser partícipes de su proyecto de amor y encarnar la belleza del Evangelio en los diversos estados de vida”, destacando que: “Nuestra vida se realiza y llega a su plenitud cuando descubrimos quiénes somos, cuáles son nuestras cualidades, en qué ámbitos podemos hacerlas fructificar, qué camino podemos recorrer para convertirnos en signos e instrumentos de amor, de acogida, de belleza y de paz, en los contextos donde cada uno vive, pero sobre todo a llamados a sembrar la esperanza y a construir la paz”.
La jornada, conocida anteriormente como del Clero Nativo, es una de las principales actividades promovidas por la Obra de San Pedro Apóstol, que en México se celebra el tercer domingo de agosto; este día, se invita especialmente a todo el Pueblo de Dios que peregrina en México a unirse en oración y sacrificio por el nacimiento y maduración de las vocaciones nativas en tierras de misión; asimismo, a ser generosos en la ofrenda económica, la cual se destina a apoyar la formación de las religiosas, religiosos y seminaristas misioneros.
Como parte de las actividades que antecedieron a esta jornada 2004, el viernes 16, a las 8 de la noche, se llevó a cabo una Hora Santa, en el templo parroquial de Paracho; el sábado 17, las actividades comenzaron con la oración de la mañana, en la comunidad indígena de Nurío, y posteriormente en Paracho, a las 5 de la tarde, se realizó una mesa testimonial en el Cine Rex, que giró en torno a la temática de análisis propuesta para esta jornada anual, basada en 3 ejes o temas: Llamados al servicio de toda la Iglesia, La vocación misionera expresión de la universalidad de la Iglesia y La urgencia de las vocaciones nativas, a cargo de un sacerdote misionero, un diácono y religiosas misioneras. Posteriormente, como cierre, se tuvo el rezo del Rosario Misionero, en la explanada de la Casa de la Cultura de Paracho.
Finalmente, el domingo 18, después de las 5 de la tarde se tuvo la solemne Misa de clausura de la jornada, presidida por Mons. Francisco Figueroa Cervantes, Obispo Auxiliar de Zamora, quien estuvo acompañado por varios sacerdotes, entre ellos el Sr. Cura Sergio Romero Candelario, el Pbro. Antonio de Jesús Mascorro Tristán, MG, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias en México, y el Pbro. José Luis García Romero, Director de la Comisión de Misiones de la Diócesis de Zamora, quien es Vicario Cooperador de la Parroquia de Paracho y coordinó los trabajos de esta jornada nacional. En su mensaje central, Don Francisco Figueroa, invitó a los presentes a que “viviendo los propios carismas de las vocaciones, las comunidades reconozcan y acompañen a los más jóvenes a caminar animados por el Espíritu Santo, y comprometidos en dar una respuesta generosa al llamado de Dios”.
La emotiva celebración eucarística estuvo enmarcada por las ofrendas, la música y danzas purépechas; además, fue antecedida por una gran procesión festiva, desde el monumento de la Guitarra y la glorieta de la Mujer purépecha, ambos sitios ubicados a las afueras de Paracho, con la participación de diversas comunidades purépechas no sólo las que integran la parroquia-municipio de Paracho, sino otras como Angahuan, Santa Ana Zirosto y Uruapan, acompañadas por las imágenes peregrinas de los santos patronos y las banderas de colores que representan a los 5 continentes. Como cierre de la jornada hubo convivencia en la Casa de la Cultura de Paracho.
¡Enhorabuena a todos los participantes, anfitriones y organizadores!
0 comentarios