El viernes 29 de septiembre, en Pomacuarán, se celebró una gran fiesta en honor al arcángel San Miguel, su santo patrono, en medio de diversas muestras de fe y devoción. Esta antigua comunidad indígena se encuentra en el municipio de Paracho, asentada en la llamada Meseta Purépecha, y pertenece a la Parroquia de San Pedro Apóstol.
De acuerdo con La Relación de Michoacán, Pomacuarán, como otros pueblos de esta región, fue fundado en el siglo XVI, mucho antes que Paracho; entre sus principales evangelizadores se encuentra Fr. Juan de San Miguel, quien llevó a cabo la evangelización de los pueblos de La Sierra Purépecha. Pomacuarán posee un hermoso templo que aún conserva sus elementos y estructura primitiva, además de un artesonado con pinturas y relieves policromados y un amplio atrio donde sobresale su cruz atrial. Otro evangelizador de esta región fue Fr. Francisco de Castro.
Esta comunidad es atendida espiritualmente por el Pbro. José Luis García Romero, Vicario de Paracho, quien con el apoyo de los cargueros de Pomacuarán, así como de un grupo de fieles, organizó una solemne novena de misas, rosarios y procesiones, en los que participaron otras comunidades circunvecinas, los grupos apostólicos, los gremios y diversos oficios de la comunidad.
Entre las principales actividades del día de la fiesta, la solemne Misa de Función se llevó a cabo a la 1 de la tarde, presidida por el Pbro. José Luis García Romero, quien estuvo acompañado por el Sr. Cura Sergio Romero Candelario, Párroco de Paracho, entre otros sacerdotes. La homilía estuvo a cargo del Pbro. Brandon Israel Godínez Gómez, Vicario de Paracho, quien con palabras claras y sencillas invitó a los presentes ser fieles mensajeros del Evangelio de Cristo, en medio del mundo, como testigos y portadores de la verdad, en cuyo anuncio de Salvación, los ángeles y arcángeles son los principales testigos y amigos de Dios.
Finalmente, por la tarde se llevó a cabo una gran verbena popular, a las afueras del templo de San Miguel que culminó con la quema de juegos pirotécnicos y un vistoso castillo. Como en otros años, la festividad se prolongó durante varios días más, con diversas actividades culturales y deportivas, enmarcadas por la música tradicional, además del vaivén de otras expresiones, como las procesiones religiosas, encabezadas por las imágenes de San Miguel Arcángel, comúnmente llamado el príncipe de la milicia celestial. ¡Enhorabuena!
Por: José Antonio Villanueva Ch.
0 comentarios