La parroquia de Ario fue por mucho tiempo vicaria dependiente de la Parroquia de la Purísima o del Sagrario de Zamora. Hasta que fue erigida como tal en diciembre de 1952, siendo su primer párroco el Sr. Cura Dn. Ignacio González Zepeda. De esta parroquia se desmembraría más tarde la parroquia de El Llano.
Entre los sacerdotes que han atendido a esta comunidad están los PP. Rafael Verduzco, Luis G. Vera, Luis Haro, Francisco Guzmán, Jesús Olivares, Francisco Padilla, José Macías, Francisco Del Río, Espiridión Arceo, Mariano Álvarez, Benjamín Serafín, Porfirio Medina, Luis M. Zamora, Francisco Esquivel, Luis Calderón, Javier López, Serafín Vega, Fernando Fernández, Guillermo Bernal, Eligio Román, entre otros.
Se ubica a tan solo unos kilómetros de Zamora. La total remodelación del templo y su decoración se terminó durante el gobierno del P. Calderón, con la asesoría del vicario el P. Mario Amezcua, perito en arte sagrado.
Muchos buenos ciudadanos de Ario han sobresalido por ocuparse del bienestar social, tales como Dn. Agapito Del Río, Dn. Aurelio Del Río, Dn. Luis Godínez, Dn. Juan Peña, Eloisa Gil, Silvia Peña y Ma. Estela Gómez, por mencionar algunos.
La comunidad vive dos fiestas en honor a su patrona, la madre de San Agustín de Hipona. Una de ellas el 4 de mayo, la de mayor auge. Santa Mónica es la santa patrona de las mujeres casadas, madres y viudas. En una época en la que la mujer estaba siempre y en todo caso relegada a un papel subalterno, obligada a vivir a la sombra de su marido, condenada al olvido, sin consideración por sus verdaderos talentos, sus capacidades, esta mujer excepcional supo sublimar el papel que le ha asignado la historia y la sociedad, convirtiéndose en un punto de referencia y símbolo para las mujeres y madres de todas las épocas.
Para esta fiesta patronal en honor a Santa Mónica, la comunidad parroquial preparó un docenario en el cual, los grupos parroquiales, las comunidades, danzas, equipos deportivos, así como los hijos ausentes, participaron fervorosamente cada uno de los días.
El día de la fiesta, hubo las tradicionales mañanitas, así como una bonita alborada, seguida de las primeras comuniones y las confirmaciones en las que nuestro pastor Mons. Javier Navarro Rodríguez administró el sacramento de la confirmación a sesenta adolescentes. Antes de esta celebración, Mons. Javier Navarro bendijo una hermosa imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, labrada en cantera, la cual se puso en el atrio de la parroquia. Por la tarde, fue la tradicional bendición con la imagen de Santa Mónica.
Cabe señalar que durante el docenario fueron invitados a celebrar la Eucaristía Sacerdotes pertenecientes a la Foranía Zamora Norte, así como Sacerdotes originarios de este hermoso pueblo de Ario de Rayón.
Felicidades al P. Francisco Javier Moreno, Párroco de Ario de Rayón y a todo su equipo parroquial, así como a cada una de las personas que, de buena voluntad, animan, cooperan y trabajan por la realización de esta bonita fiesta Patronal a Santa Mónica.