Por: Pbro. Jesús Barragán Bueno

Gracias a Dios hemos podido concluir el Preseminario de Verano para adolescentes varones de 3ro de secundaria, el cual se llevó a cabo del domingo 21 al viernes 26 de julio en las instalaciones del Seminario Menor. Ha sido una experiencia muy grata al contar con la presencia de 38 adolescentes provenientes de diferentes parroquias de nuestra diócesis. La finalidad de este Preseminario es lograr presentar un grupo de nuevo ingreso al Seminario Menor. Bajo la coordinación del Pbro. Jesús Manuel Clemente, las actividades que se pudieron realizar pretendieron ayudar a los muchachos a conocerse un poco más, profundizar en el tema de la vocación y vivir una experiencia interna en el Seminario. Si bien, para los participantes es un reto adaptarse y convivir en compañerismo y amistad. Muchos de ellos gustan de la experiencia y más aún, muestran inquietud por la vocación sacerdotal. Fruto de este esfuerzo pastoral que organizó la Promoción Vocacional del Seminario, fueron aceptados 18 adolescentes para nuevo ingreso, que se integran con otro  grupo de adolescentes que fueron aceptados en el Preseminario de Semana Santa, abriendo así la posibilidad de que el ingreso sean una treintena.

Cabe destacar que con esta actividad el ciclo de actividades se cierra y con ello el Pbro. Jesús Manuel Clemente deja de colaborar directamente con la Promoción Vocacional para integrarse de lleno como parte del Equipo Formador en la plantilla del Seminario Menor. Me es oportuno expresar mi gratitud a mi hermano sacerdote quien a lo largo de dos ciclos colaboró diligentemente con este servicio, regalando con ello las primicias de su ministerio sacerdotal. Le deseo la bendición de Dios y por supuesto ¡éxito! en su nueva encomienda. Al igual, agradezco a los seminaristas que colaboraron en la realización de esta experiencia: Sem. Salvador Pulido, Sem. José Luis Suárez y Sem. Josué Armando Ruiz. A la experiencia del preseminario la enriquece la presencia de nueve seminaristas menores, las religiosas de la Salle, personal de trabajo, sacerdotes temistas, profesionales y el vicerrector del Menor. Esperamos que la labor realizada en este preseminario no sólo abone con nuevos integrantes, sino que de entre ellos el Señor llame y confirme en la vocación a varios de los adolescentes participantes. Así lo hemos pedido y rezado al Señor en la eucaristía y la oración personal. Sabemos que la vocación sacerdotal se va formando paso a paso y que requiere de un compromiso de acuerdo a la edad del formando y un esmerado compromiso de parte del equipo formador.

Agradezco a las comunidades parroquiales de la Resurrección, San Juan Nuevo, Guadalupe, que a lo largo de la semana se hicieron presentes para bendecirnos con su apoyo con alimentos, lo mismo al grupo Fyvoc Cristo Rey Uruapan, la parroquia de Taretan que nos recibió en el bonito paseo a las cascadas de las Goteras. Al igual nuestra gratitud por el apoyo espiritual con el que amigos y bienhechores del Seminario nos consideraron para acompañarnos en la realización de esta actividad.